Si eres de los que solo se acuerda de acudir al centro dental cuanto tiene alguna molestia o para efectuar algún tratamiento en concreto, este septiembre deberías replantear esta mentalidad y darle la importancia que merece a la frecuencia de la revisión dental.
La importancia de la frecuencia de la revisión dental
Es muy común que la gente solo visite al dentista cuando se encuentra con un problema dental de relevancia el cual, en la mayoría de ocasiones, podría haberse evitado o aminorado su importancia, de haberse detectado a tiempo en una revisión rutinaria.
En la medicina y en la odontología, la prevención juega un papel fundamental para evitar y mitigar la mayor parte de las enfermedades que nos pueden afectar.
En el caso de patologías como la caries, la enfermedad periodontal, las molestias en las mucosas o los problemas musculares, el hecho de poder diagnosticarlos en un estadio temprano, va a cambiar el pronóstico y evolución de las mismas, así como peores desenlaces. Con visitas periódicas y frecuentes al dentista, podremos atajar la mayoría de problemas más severos.
¿Con qué frecuencia hay que ir al dentista? Frecuencia de la revisión dental
Esta pregunta va a tener distinta respuesta, dependiendo de las circunstancias personales y del estado de salud bucal que presentemos:
- Si en principio no sentimos ningún síntoma o signo de patología bucal, la frecuencia de la revisión dental debería ser al menos de una vez al año. En ella se revisará el estado general de la boca y se realizará una higiene dental profunda en el gabinete; a su vez, localizaremos, en su caso, cualquier patología que pudiera haber empezado.
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¿Cuál es la frecuencia de la revisión dental si hay problemas periodontales?
En los casos en los que ya hay enfermedad periodontal tratada y diagnosticada, la frecuencia de la revisión dental dependerá de la severidad del caso y de la progresión de la misma.
- Se efectuará cada 6 meses e incluso cada 3, de considerarse necesario, para controlar el estado y salud de las encías.
- En casos de pacientes con grandes rehabilitaciones sobre implantes o con prótesis que dificulten la higiene dental ordinaria, la frecuencia de visitas para limpieza y revisión deberían ser de 2 veces al año. Es decir, cada 6 meses.
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Y los menores, ¿cuándo deben ir al dentista?
Para los niños, la primera visita al dentista debería producirse aproximadamente a los 3 años. A esa edad encontramos ya algo de crecimiento óseo, se puede ir previendo cómo va a ser el desarrollo y, posiblemente, en el caso de ser necesaria, determinar qué aparatología interceptiva puede ser más conveniente para controlar el movimiento de los huesos, aunque, en la mayoría de los casos no se empiece a tratar hasta los 6 o 7 años.
En esas revisiones, vamos comprobando cuáles son los hábitos de higiene bucal del niño, cómo se va cepillando, se le dan pautas para que empiece a cuidar sus dientes correctamente, y se evitan o controlan caries y posibles problemas de malposición y apiñamiento.
Tras la primera visita se recomienda una anual, sobre todo al principio, cuando el niño aún no presenta ningún tipo de patología y no lleva todavía ortodoncia u otro aparato.
A partir de los 6 años y hasta los 15 inclusive, los niños pueden formar parte del programa PADI, que les proporciona asistencia dental gratuita.
Para saber más: Centro Dental Salvador García, lleva más de 15 años participando en el Plan de atención dental infantil de la Junta de Andalucía (PADI), que proporciona asistencia dental gratuita a niños entre 6 y 15 años.
En Centro Dental Salvador García, una vez que nos asignamos a cada menor como dentista de cabecera, os solemos llamar para recordaros periódicamente cuándo es conveniente que el niño venga a hacerse la revisión y los tratamientos gratuitos que necesite.
De este modo conseguimos:
- Que su desarrollo dental sea adecuado, supervisado por un facultativo, evitando la aparición de problemas.
- Que se solventen satisfactoriamente los que hayan podido surgir y se puedan prevenir otros, detectándose a tiempo con simples revisiones periódicas.
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La boca es el origen de muchas funciones esenciales. Con ella, junto a los dientes masticamos alimentos y se inicia el proceso alimenticio y de la digestión, nos comunicamos al poder emitir fonemas, mostramos emociones con gestos articulando de distinta manera la musculatura facial. Por ello, mantener nuestra boca en un estado óptimo de salud es fundamental y esto implica algo más que cepillarse después de cada ingesta de comida.
Pese a la importancia de la salud dental, los estudios que se realizan sobre la materia aún arrojan resultados que necesitan mejorarse. Según se pone de manifiesto en el estudio sobre el sector dental elaborado por el Instituto de Investigación de Mercados Key-Stone, en colaboración con Fenin, solo un 60% de la población española visitó al dentista al menos una vez durante 2017, y solo la mitad de este porcentaje acudió para realizare una limpieza dental.
Y tú, de qué porcentaje de población formas parte? Si aún tienes pendiente visitarnos este año, ¡no lo dejes más! Puedes rellenar nuestro formulario de contacto, pinchar en nuestra web en SOLICITAR CITA o contactar por
